ENTREVISTAS
"El Festival es un puente entre
América Latina e Italia"
Rodrigo Diaz
director del Festival de Cine LatinoAmericano de Trieste
pulse sobre la foto para verla grande
El Festival de Cine Latinoamericano, que
se realiza desde hace 18 años en la ciudad de Trieste (norte de Italia) es un faro para
los cineatas de un continente que produce cine de calidad, pero que, por problemas de
distribución es poco conocido en Italia y en Europa.
El Festival ha contribuido a crear un puente entre ambas culturas, sostiene el director
Rodrigo Díaz (Chile, 1950), figura clave de esta actividad, pues durante todos estos
años ha logrado mantenerlo vivo, pese a los recursos limitados con los que cuenta.
El Festival se ha realizado durante 18 años con pocos recursos económicos y hoy goza de
prestigio internacional. ¿Cómo han cambiado las cosas durante todo este tiempo?
Seguimos vivendo en la incertidumbre. El problema no es tanto de disponibilidad
económica, sino más bien cultural: es necesario entender la importancia que tiene el
Festival de Trieste en el mundo latinoamericano. En América Latina todos los medios de
comunicación hablan de este festival y se publican artículos en los principales diarios.
Trieste, gracias al Festival ha obtenido una difusión en latinoamerica, que antes no la
tenía. Sería importante que existiera una conciencia al respecto y que se crearan
programas que permitan establecer relaciones con la cultura de América Latina, con los
latinoamericanos de origen italiana.
¿Qué tipo de imagen de América Latina y de sus cineastas pretende dar el Festival?
Ninguna imagen preconstruida. Nosotros quisiéramos que el Festival sea un instrumento
para establecer un puente entre Italia y América Latina, no sólo en el campo cultural,
pero también en otros aspectos tecnológicos. Italia podría jugar un papel importante y
estimular la producción latinoamericana creando programas de cooperación
que ayuden al cine local. Por ejemplo, podría crear un premio para las películas que
hablan de la imigración italiana en América Latina. También podría colaborar para que
los filmes hechos en digital se puedan ver en las salas. El problema es ver si a Italia le
interesa conocer la otra Italia.
¿Cree que hay interés por la otra Italia?
Es díficil saberlo. Es necesario hacer todo lo posible para que Italia supere
esta laguna cultural hacia América Latina. Si el cine es un mercado, entonces la
presencia italiana en América Latina se debe estimular, porque el mercado latino es
grande. España ha demostrado que es posible realizar una política de cooperación
cinematográfica con los países latinoamericanos. ¿Si España ha demostrado que es
posible, por qué un joven cineasta latino de origen italiano debe pasar por Madrid y no
puede hacerlo através de Roma.
¿Cuáles son los criterios con los que se seleccionan las obras que participan en
Trieste?
Primero que nada es necesario destacar que el Festival no cuenta con muchos recursos: no
premiamos con dinero. A los ganadores los premiamos simplemente con una obra del escultor
Alfredo Pechile. Es claro que no podemos luchar contra festivales che ofrecen premios de
$20 o $40 mil. Entonces, la selección es artística y por lo tanto, hemos adquirido una
buena imagen porque le hemos dado peso a las figuras que asisten y por otro lado, todas la
obras tienen un gran valor artístico. Con tales garantías, para un director pasar por
Trieste es un asunto de prestigio. Además prevalece la calidad artística, que para este
Festival es fundamental. Por otro lado, no hay ningún prejuicio y se seleccionan todos
los géneros: comedias, dramas, thrillers y hasta filmes de horror. Hemos
demostrado que el cine latinoamericano produce de todo. Algunas obras las presentamos en
la sección informativa con la idea de mostrar lo que ocurre y qué cosas se producen. Sin
embargo, no proponemos cosas frívolas, inútiles.
¿Cómo se organiza un Festival con pocos recursos económicos?
No contamos con un equipo de trabajo fijo en Italia, por lo tanto, los contactos son
más bien con cineastas en Lationoamérica, quienes nos indican las mejores
producciones y, por otro lado, asistimos a los principales festivales latinoamericanos,
como el de La Habana, Buenos Aires, Guadalajara para ver películas y saber qué ocurre y
cuáles son las tendencias.
Teniendo usted la posibilidad de asistir a festivales de este tipo, ¿Cómo ha cambiado el
cine latinoamericano en los últimos años? ¿Está en grado de competir con el mercado
internacional?
El problema del cine latinoamericano, como para toda la cinematografía mundial son los
Estados Unidos. Existe un tipo de dictadura de la pantalla grande y es díficil entrar al
mercado. Sin embargo, este no sólo es un problema de los Estados Unidos, sino también de
quien no tiene un buen proyecto para darse a conocer. Es comprensibile que los países
pequeños se queden atrás, pero México, Argentina o Brasil, los cuales gracias al
mercado interno puedan ganar cuatro veces el costo de la producción.
Este año se celebraron 30 años del asesinato del ex presidente de Chile, Salvador
Allende ¿Por qué el Festival ha querido recordar su figura con la creación de un nuevo
premio que lleva su nombre?
Es una idea que nació de las autoridades chilenas, las cuales nos han propuesto un
premio para recordar la memoria del presidente. Sirve para recordar la coherencia, el peso
moral y ético de este hombre político. Allende es la figura más grande que ha tenido
América Latina en el siglo pasado. El hecho de que el presidente de Bolivia escape a
Miami demuestra la clase de líderes con los que contamos en nuestros países: no existe
país que no haya tenido un líder en fuga. Esto demuestra la grandeza de Allende, el cual
sostenía que nunca lo habrían enviado al exilio en otra nación porque no soportaba la
idea de vivir en el extranjero tranquilo mientras su país conocía la represión. Sólo
el voto de los chilenos habrían podido expulsarlo del gobierno. Y así ha sido.
Arriba
:.: Home Page |